Permitirá elevar el número de las prestaciones por cese de actividad. |
El cambio, que se quiere incluir dentro de la reforma tributaria que el Gobierno se comprometió a presentar en el primer trimestre de 2014, sí obligará a tributar por el sistema de estimación directa a los emprendedores cuyos clientes sean mayoritaramente empresas.
Exigirá llevar una contabilidad básica, con un registro de ingresos y gastos identificables que permite demostrar con la máxima transparencia la existencia de pérdidas y ganancias en el negocio, lo que ayudará también a la lucha contra el fraude fiscal.
Desde la Agencia Tributaria se estima que la renta neta de los autónomos, una vez deducidos los gastos profesionales, Seguridad Social incluida, no llega en la mayoría de los casos a la cantidad de 10.000 euros anuales, y que el 77 por ciento de los emprendedores que se encuentra en el régimen de estimación directa no llega a una renta efectiva de 1.000 euros al mes. En cuanto a los autónomos que declaran por el sistema de módulos, la media anual estimada supera ligeramente los 10.722 euros anuales y su disminución progresiva es menor ya que este sistema se establece de acuerdo con datos objetivos indicados por Hacienda y, pese a la crisis, la reducción de los módulos no ha ido pareja a la variación del negocio.
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