España ha perdido 380.000 residentes extranjeros en los últimos cuatro años

España ha perdido 380.000 residentes extranjeros en los últimos cuatro años, un hecho que coincide con la tendencia que ha producido que más de 100.000 españoles hayan decidido buscar trabajo lejos del país. 

El año 2008 registró un saldo positivo con la llegada neta de 310.642 inmigrantes, mientras que en 2013 se llegó a alcanzar un saldo negativo de  256.849 personas, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Atendiendo al fenómeno de los movimientos migratorios extranjeros, hay en España 380.000 inmigrantes menos que en el año 2010. En el padrón municipal por su parte, desde enero de 2010 se registran 1.071.712 extranjeros menos en la actualidad.  La diferencia entre estas dos estadisticas tiene que ver con que el padrón es un censo en el que hay que registrarse. Muchos extranjeros no renuevan su alta en este tipo de censo, aunque pueden seguir en territorio nacional, y por este motivo hay tales diferencias. Los países que más población han perdido en España son Rumanía, Reino Unido y Ecuador.

A este fenómeno se une la irrupción de la emigración española. Cada vez más residentes deciden emigrar lejos de nuestras fronteras. En el año 2008 salieron de España 33.505 ciudadanos. El saldo migratorio era de apenas 1.804 personas, ya que volvieron 31.701 españoles. Desde entonces, la cifra de salidas se ha multiplicado por cuatro sólo en cuatro años, (79.306). Por su parte las entradas se mantienen al mismo nivel, exactamente 33.393 en 2013. De este modo el saldo migratorio fue negativo, con 45.913 habitantes menos para España.