Las cotizaciones que pagaron los trabajadores autónomos durante 2013 cubrieron el 65% de lo que la Seguridad Social les abonó en pensiones, según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Por su parte, los trabajadores por cuenta ajena (inscritos la enorme mayoría en el Régimen General) cubren el 83,4% del total de prestaciones que les paga el sistema público de protección social. El desequilibrio entre las aportaciones y el coste de las pensiones en el caso de los autónomos llega hasta los 5.568 millones de euros anuales.
En los primeros seis meses de este año la situación se ha agravado según los datos del Boletín Informativo de la Seguridad Social correspondiente al mes de junio. Durante este semestre el régimen especial de trabajadores autónomos recaudó 3.558 millones de euros, y el gasto de sus pensiones se elevó a 5.976 millones. Esto significa que el déficit se ha situado en 2.418 euros, menor que en el primer semestre del año anterior, pero con un ratio de cobertura también más bajo, en concreto alcanza sólo al 59% del volumen de sus pensiones.
La diferencia entre ingresos y pagos debe cubrirse con fondos públicos que garanticen la estabilidad del sistema. La cuantía minima de las pensiones se establece anualmente en la Ley de Presupuestos y tiene como objetivo garantizar un mínimo de subsistencia para el pensionista siempre que no obtenga rentas por otras vías. Para 2014 se situó ese umbral de rentas en 8.260 euros con cónyuge a cargo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario